MC CHOUFFE: UNA BELGA QUE QUIERE SER ESCOCESA

Todos conocemos perfectamente la procedencia de las cervezas D´Achouffe: es una cervecera situada en Las Ardenas, en la zona Valona de Bélgica, muy cerca de Luxemburgo.

Algo menos conocido es el nacimiento de la cervecera. Como si de un chiste se tratara, su nacimiento tiene lugar cuando en la década de los 70´s del pasado siglo, dos cuñados, uno de origen flamenco y otro de origen valón, entretienen su tiempo en elaborar cerveza casera. El éxito obtenido entre los vecinos les lleva a fundar en 1.982 la microcervecería, como complemento al restaurante que regentaban.  Ese año produjeron la primera cuba de LA CHOUFFE (49 litros). Hoy en día es una gran cervecera, perteneciente al grupo Duvel-Moorgaat, un importante atractivo turístico para la zona,  mundialmente conocida, y no sólo por la calidad de sus cervezas, sino también en gran parte debido a la exitosa marca del gnomo (“chouffe” en el dialecto local), que es su seña de identidad.

Esa su primera cerveza (esa cuba de 49 litros), fue LA CHOUFFE, típica e inconfundible Ale Belga. Pero ya desde el final de la segunda guerra mundial eran apreciadas en todo Bélgica las cervezas oscuras y nutritivas que los soldados ingleses y escoceses habían dado a conocer por las tierras que estaban liberando de la ocupación nazi. Cuando nace D´Achouffe estas cervezas ya estaban siendo elaboradas por otras cervecerías belgas, y los cuñados Pierre Gobron y Chris Bauweraerts se propusieron hacer una versión de su creación inicial más oscura y con mayor graduación alcohólica. Naciendo así la Mc Chouffe, cerveza que sin perder su carácter belga, evoca el estilo de cerveza “scotch”, aunque queda también muy próxima a las cervezas oscuras de abadía.

En fin, toda una combinación de estilos para apreciar en una misma copa. 

Es una cerveza de un intenso color marrón oscuro, de espuma beige, abundante y muy esponjosa. De aroma muy intenso, en parte por su graduación alcohólica. Es una cerveza de alta fermentación, con segunda fermentación en botella. Para apreciar bien su gusto y aromas no debe ser tomada fría, y aconsejamos una temperatura de servicio de 8º a 12º. Su aroma incluye notas frutales y especiadas, características propias de las cervezas belgas. De un sabor muy complejo, evocando desde los frutos rojos (ciruelas y pasas) a las maltas tostadas y caramelo. Es una cerveza de cuerpo medio, lo que en cierto modo sorprende por su apariencia y aromas. El final es ligeramente amargo.

Y si no lo has hecho antes, fíjate en la botella: el gnomo ha cambiado su habitual pantalón azul por otro con un estampado a cuadros que podríamos considerar típicamente escoceses.

Y fíjate ahora en el nombre “Mc” (hijo de), que es un distintivo propio y muy extendido entre los apellidos escoceses y galeses.

Ya no tenemos dudas: Mc CHOUFFE es una cerveza belga que quiere ser escocesa, aunque no lo consigue totalmente, quizás porque los monjes belgas la atrapan y la llevan al estilo de abadía.

Y, como siempre, para más info:  www.cervezasdiferentes.es