Clásico. De trigo, naturalmente.

Quién no sabría contestar a la pregunta ¿qué es un clásico?

De los varios usos que tiene esta palabra, nos quedamos hoy con la que se refiere a algo que no se aparta de lo tradicional, de las reglas establecidas por la costumbre y el uso.

Con acierto, aquellos que gustan de buenas cervezas alemanas, buscan, casi siempre y ante todo, calidad y tradición.

En la actualidad, el mundo cervecero se mueve entre tendencias de innovación y constantes búsquedas de novedades y sabores que se aparten de lo habitual. Pero ese “nuevo mundo” contrasta con los gustos de quienes disfrutan de los sabores clásicos y auténticos.

Siendo distintos, no son incompatibles. Hay momentos para todo.

Y hoy nos toca disfrutar de todo un clásico: una cerveza SCHENEIDER WEISSE, de trigo, naturalmente.

Elaborada por la cervecería SCHENEIDER WEISSE, de origen familiar, y que aún hoy conserva este carácter. Aunque ahora nos parezca impensable, durante siglos la elaboración de cerveza en lo que ahora es Alemania estaba limitada, y era un privilegio reall, según estableció el Duque Maximiliano I en 1.548 para la cerveza de trigo. Hasta que una Ley de 1.798 abolió el privilegio para Baviera, permitiéndose a los cerveceros la elaboración de cerveza de trigo a cambio de pagos anuales al estado. Pasando así la fabricación de la cerveza a manos privadas.

Sin embargo, hacia 1.872 la popularidad de la cerveza de trigo había caído notablemente, y en ese momento el que entonces era cervecero real GEORG SCHNEIDER compró los derechos de elaboración al Rey bávaro Ludwig II, haciendo que un estilo casi en extinción “resucitara”. Fue el primer plebeyo en adquirir el derecho para elaborar cerveza de trigo.

Y después de más de 145 años, la cervecera utiliza la misma receta. ¡Esto es un clásico!

El proceso de elaboración de esta cerveza, tan tradicional, puede sin embargo ser desconocido. La cerveza fermenta en cubas abiertas, en lugar de tanques cerrados, como es habitual actualmente. En las propias cubas los maestros cerveceros “desnatan” la levadura, en un proceso manual y diario que tiene como finalidad eliminar lo que en alemán se conoce como “kräuse”, que es la espuma que se forma en el proceso de fermentación, y que contiene ese amargor resinoso que de esta forma se retira de la cerveza. Ello dar lugar a los sabores suaves, afrutados y aromáticos de estas cervezas de trigo.

Al concluir esa fermentación abierta, la cerveza se envasa inmediatamente en botellas o barriles, sin ningún tipo de tratamiento adicional, ni proceso de calor ni filtrado. La cerveza conserva así todas las cualidades de este proceso natural, con esa frescura tan preciada. La fermentación continúa en la botella.

SCHNEIDER WEISSE no ofrece únicamente este tipo de cerveza tradicional de trigo. Tiene un amplio surtido, con modernas cervezas más lupuladas (TAP 5 Meine Hopfenwiesse), robustas cervezas doppelbock (Tap 6 Mein Aventinus y Aventinus Eisbock), e incluso otras especialidades que han pasado por barrica (Tap X Eisbock Barrique).

Las cervezas SCHNEIDER WEISSE se encuentran entre las cervezas de trigo más distinguidas a nivel nacional e internacional, y se disfruta en más de 40 países de todo el mundo.

La SCHENEIDER MEINE HELLE WEISSE TAP 1,  de la que hemos disfrutado hoy, está elaborada en un 60% con malta de trigo y en un 40% con malta de cebada de la región de Kelheim. Fresca y a la vez con cuerpo e intensa. Es una muestra del clásico estilo weizenbier y de trigo alemanas. Cora aromas a pan recién hecho, plátano y especias. De sabor fresco y afrutado, con un ligero amargor con notas cítricas. Cerveza muy fácil de beber, que tiene baja graduación alcohólica.

Y ya sabes, si quieres probar:  www.cervezasdiferentes.es